Balance de carbono en remolacha azucarera y otros cultivos de regadío en Castilla y León
Sectores agrícolas
Castilla y León representa el 3,4% de la superficie de cultivo de la Unión Europea. La importancia de la agricultura regional en el contexto nacional en cuanto a producciones también es relevante, siendo un referente nacional en muchos productos agrícolas.
Con respecto a los cereales, en Castilla y León se produce el 74% del centeno nacional, el 45% del trigo y el 36% de la cebada. En cultivos industriales, se produce el 70% de la remolacha azucarera y el 40% del girasol. Y, aunque nuestra región no es conocida por su producción hortícola, producimos el 37% de la patata nacional, el 47% de la zanahoria y el 52% del puerro.
Desde el ITACyL se abordan los problemas de estos sectores desde diferentes puntos de vista: la diferenciación varietal y de calidad, nuevas técnicas de cultivo más respetuosas con el medio ambiente, la lucha contra plagas y enfermedades emergentes, etc., haciendo hincapié en aquellos sectores considerados estratégicos, bien por su superficie o por su valor comercial.
Proyectos
Balance de carbono en remolacha azucarera y otros cultivos de regadío en Castilla y León
Título
BALANCE DE CARBONO EN REMOLACHA AZUCARERA Y OTROS CULTIVOS DE REGADÍO EN CASTILLA Y LEÓN
Presupuesto
195.093 € (Financiación FEADER, PDR CyL 2014-2020, submedida 16.2)
Colaboración público-privada
Periodo
20 de noviembre de 2017 a 31 de diciembre de 2020
Objetivos
El objetivo final de este proyecto es el aprovechamiento sostenible de los recursos del medio para el desarrollo de cultivos en regadío, económicamente viables, en la región de Castilla y León. También es objetivo de este proyecto mejorar la competitividad del sector agroindustrial de esta región, a través de diferentes estrategias que mejoren las prácticas y los procesos de producción mediante la convergencia de sectores estratégicos para Castilla y León: el energético, el agrícola y el industrial.
Para ello se pretende evaluar y comparar la capacidad de fijación de carbono en cultivos de remolacha, maíz, patata y trigo de fuerza en rotaciones de cultivo, tanto en las plantas como en el suelo; determinar las emisiones de CO2, el análisis energético y el balance de carbono en cultivos y rotaciones de cultivo en regadío. Se obtendrán los costes y márgenes económicos en cuatro cultivos de regadío, tres considerados estratégicos para Castilla y León (remolacha, trigo de fuerza y patata), evaluando su productividad y sus efectos en el medio ambiente.
Objetivos específicos
Objetivo 1. Evaluar el efecto de los distintos sistemas de producción (rotaciones de cultivo), en la acumulación y fijación de carbono en el suelo y en el almacenamiento anual de carbono en remolacha, maíz, patata y trigo.
Objetivo 2. Estimar las emisiones de CO 2 desde el suelo en cada cultivo y en las rotaciones de cultivos.
Objetivo 3. Realizar un análisis energético y económico en cada cultivo y en las rotaciones de cultivos.
Objetivo 4. Determinar el balance de carbono comparando cada cultivo y cada rotación.
Objetivo 5. Transferencia y difusión de los resultados.
Resultados hasta el momento
Las actividades que se han llevado a cabo hasta el momento son las siguientes:
Se han elegido e identificado 3-4 parcelas por localidad en 5 localidades de Castilla y León, representativas de las zonas de regadío y de producción de remolacha de la Comunidad: Horcajo (Ávla), Milagros (Burgos), Valdevimbre (León), La Overuela (Valladolid) y Toro (Zamora). Durante el primer año se caracterizaron los suelos de cada parcela mediante análisis y calicatas, para determinar, entre otras cosas, el contenido en materia orgánica y la densidad aparente.
En cada una de las parcelas y para las tres campañas previstas en el proyecto, se evaluará la producción de biomasa de cada uno de los cultivos, para lo cual se tomarán 2 muestras en tres puntos geolocalizados de cada parcela, se procesarán separando las distintas partes del cultivo y, mediante análisis de laboratorio, se determinará la cantidad de carbono y nitrógeno de cada una de las muestras.
El análisis energético es un modo de evaluación de las cantidades de energía asociadas a los factores implicados en los procesos de producción de un bien o servicio. Su campo de aplicación es muy amplio y está directamente vinculado a la actividad económica y medioambiental. Para el cálculo de la energía se utilizarán los valores de energía asociada a los principales factores de producción y los valores medios de consumo de combustible en las diferentes operaciones mecánicas.