CONCLUSIONES DE LA JORNADA 'GANADERÍA: CLAVE DE FUTURO Y OPORTUNIDADES'

En el marco del 20 aniversario de la creación del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León se celebró la Jornada "GANADERÍA: CLAVE DE FUTURO Y OPORTUNIDADES", cuyas conclusiones se exponen a continuación:

El abandono en las granjas no es por falta de trabajo, sino por dimensionamiento, conciliación, reconocimiento social, sin olvidar la carga burocrática y la falta de rentabilidad. La falta de interés por el medio rural es general en una sociedad principalmente urbanita que no se identifica con él ni lo reconoce adecuadamente, lo que provoca falta de profesionales a todos los niveles (ganaderos, agricultores, veterinarios, ingenieros, técnicos¿), pero no es algo nuevo ni exclusivo de la ganadería.

Somos conscientes de que el desequilibrio poblacional no es sostenible a largo plazo: la España rural resulta esencial para el mantenimiento y funcionamiento de la España urbana. La sociedad también debe ser consciente de este hecho.

Por tanto, deben reforzarse las vías de comunicación con la población para proporcionar a la sociedad una imagen de la ganadería más acorde con la realidad, exenta de convencionalismos. El esfuerzo, trabajo y buen hacer de quienes siguen firmes en el medio rural, entre ellos, muy especialmente, agricultores y ganaderos debe ser adecuadamente valorado por la sociedad: mantienen y cuidan el medio natural, crean oportunidades de trabajo y desarrollo y, además de eso, producen alimentos que son el sustento de toda la población.

De lo hablado en esta jornada podemos decir que hay lugar para la esperanza. 

Pero debemos darnos prisa, en unos pocos años cerrarán por jubilación hasta el 75 % de las granjas. Existe un trabajo creciente por parte de diferentes colectivos y empresas para dar vida a los pueblos a través de soluciones (ligadas en gran parte a la ganadería) que requieren del apoyo de las administraciones. No hay un único ejemplo de trabajador, como tampoco lo hay de familia o de puesto de trabajo.

Se requiere un cambio de paradigma: un abordaje multidisciplinar (laboral, social y económico), contemplar nuevas formas de habitar el medio rural, nuevos modos y tipos de empleo (también en las granjas); también debe evolucionarse en la gestión del capital humano, adaptándose a la idiosincrasia de cada granja. Y es necesario un acompañamiento de los trabajadores (tanto en el puesto de trabajo como a nivel familiar y social).

Es necesaria una disminución de las trabas burocráticas, que las empresas ganaderas puedan centrarse en las personas, en el crecimiento y la motivación del personal, que se dediquen esfuerzos a la organización y racionalización del trabajo y que el esfuerzo se vea recompensado no sólo por la satisfacción de una vida plena, sino también rentable laboral, familiar y económicamente.

La formación y la educación son pilares clave. Impulsan el desarrollo y permiten inculcar a los niños y a los jóvenes (ellos son el futuro) el amor y el orgullo por el medio rural, el trabajo y el esfuerzo.

Estas conclusiones no deben ser el final, sino el germen de una red de entidades y administraciones trabajando activamente y aunando esfuerzos para conseguir dar respuesta al motivo de la jornada. La España con baja densidad de población está llena de oportunidades y tiene futuro, que pasa necesariamente por la ganadería, cuya clave como se ha dicho en numerosas ocasiones son las personas, la clave para ser rentables, para ser eficientes y sostenibles. 

Pero es necesario actuar ya y hacer saber y comunicar a la sociedad que su futuro también depende del medio rural.

VÍDEOS DE LA JORNADA